Tener una piel más firme, con textura, con brillo en la medida justa y sin marcas de expresión. Estos son los mayores deseos de quienes se preocupan por el bienestar y la autoestima. Y, para dar respuesta a estas inquietudes, existe un nuevo método que cada vez gana más espacio en los consultorios médicos: el uso de bioestimuladores de colágeno.
¿Quieres saber más sobre cómo funcionan? ¡Sigue leyendo esta publicación y conoce más detalles sobre este método!
¿Qué son los bioestimuladores de colágeno?
Los bioestimuladores son sustancias que estimulan la producción natural y biológica de colágeno cuando se inyectan en ciertas capas de la piel. El colágeno es una de las proteínas más comunes en el cuerpo humano, cuya función es mantener las células juntas, firmes y elásticas.
A partir de los 30 años disminuye la producción de esta proteína, que forma parte de los procesos naturales del organismo. Sin embargo, la exposición excesiva al sol, el ejercicio físico intenso, la contaminación y el tabaquismo pueden acelerar este proceso.
Al perder colágeno, naturalmente, el rostro se ve más cansado, flácido y con líneas de expresión.
Por tanto, la aplicación de bioestimuladores viene a favorecer la formación de nuevas proteínas. Esto proporcionará una recuperación de la firmeza perdida a lo largo de los años y una mejora en la calidad de la piel.
¿Qué sustancias se utilizan en este procedimiento?
Las sustancias utilizadas en este procedimiento estético no están destinadas a rellenar, sino a bioestimular. Después de la aplicación, la piel queda con un aspecto de rejuvenecimiento más natural. Esta acción tendrá lugar después de la estimulación en fibroblastos, las células que producen fibras de colágeno.
Estos son los productos más utilizados como bioestimuladores de colágeno:
- Hidroxiapatita de calcio – Radiesse
- Ácido poliláctico – Sculptra
- Policaprolactona – Elansé
- Cables de RFQ
¿Cómo será el resultado?
Los bioestimuladores resultan muy agradables para los pacientes, porque promueven el efecto rejuvenecedor, de forma natural y progresiva.
Están siendo ampliamente utilizados en procesos de armonización facial y ayudan a la sutil recuperación del volumen facial, mejoran la flacidez y reducen las arrugas y marcas de expresión.
Los efectos de los bioestimuladores son graduales y duraderos, ya que el cuerpo continúa produciendo colágeno hasta 6 meses después del tratamiento, y puede verse en 4/6 semanas después de la primera sesión. Además, se recomienda que las sesiones se repitan cada 30/60 días.
Sin embargo, para lograr el resultado esperado, es importante recordar que debes buscar un buen profesional. Solo un médico experimentado como el Dr. Jaranay sabrá cuál es la mejor sustancia a aplicar, el número de sesiones y la frecuencia con la que repetir el procedimiento.
¿Cuáles son los riesgos de los bioestimuladores de colágeno?
La aplicación de bioestimuladores es muy sencilla y se puede realizar en un consultorio. Se usa una micro-cánula para insertar la sustancia en puntos específicos de la cara.
Sin embargo, como cualquier procedimiento estético, el cuidado profesional es fundamental para evitar hematomas e hinchazón de la piel.
En la mayoría de los casos, no es necesario descansar después de la aplicación. Simplemente evitar el esfuerzo físico durante 1 o 2 días y mantenerse alejado de las piscinas y saunas para reducir el riesgo de contaminación.
Aunque es un procedimiento muy simple, debes buscar un médico experimentado con excelentes recomendaciones.
Si bien los bioestimuladores representan una solución segura con resultados duraderos, estas sustancias deben usarse siempre de manera segura y siguiendo el consejo médico.
Con los cuidados necesarios, es posible realizar el tratamiento sin reacciones adversas, manteniendo la piel sana y bella por mucho más tiempo.
¿Quieres estar al tanto de todas las novedades y tendencias? ¡Síguenos en las redes sociales!