Todos hemos escuchado aquello de “tomate un zumo de naranja para prevenir el resfriado” pero los alimentos no solo sirven para prevenirnos de enfermedades, también hay muchos que pueden ayudarte a conseguir un mejor aspecto en la piel, mejorar el aspecto de nuestros dientes, conseguir que el inevitable envejecimiento de nuestras células se ralentice y muchas más cosas que te ayudarán a parecer más joven de lo que realmente eres. 

TOMATE

Este fruto es muy útil a la hora de evitar que el sol cause estragos en nuestra piel, gracias a su alto contenido en licopeno y a su capacidad para inhibir la actividad de los colágenos. Además, este antioxidante ayuda a evitar las enfermedades cardíacas, mejora la apariencia de nuestros dientes y combate el efecto de toxinas como el cadmio o las aflatoxinas.

zanahoria
ZANAHORIA

Los carotenos son un importante antioxidante al convertirse en vitamina A, al mismo tiempo que reducen la posibilidad de sufrir enfermedades cardiovasculares y aumentan la eficiencia del sistema inmunitario. De entre todos los alimentos que incluyen este compuesto de la familia de los terpenos la zanahoria es el rey. Cada 100 gramos de zanahoria aportan alrededor de 1.300 microgramos de beta-caroteno.

sandia
SANDÍA

El licopeno, otro carotenoide aportado en cantidad por la sandía, una de las frutas del verano y que debe su color rojo a dicho químico. Es otro antioxidante que hace frente al estrés oxidativo y que contribuye a regenerar rápidamente la piel ante cualquier accidente.

salmon
SALMÓN

Como también ocurre con el atún, la trucha o la caballa, este pez rebelde contiene grandes cantidades de ácidos omega-3, que refuerzan la vitalidad de nuestra piel. Es un pescado muy graso, pero también muy saludable y saciante.

queso cheddar
QUESO CHEDDAR

Saliendo de la tónica del resto de alimentos de este listado, recomendamos el queso no tanto por ser rico en proteínas, calcio y yodo (que también) como por su capacidad blanqueadora de dientes. O al menos eso aseguraba la Academy of General Dentistry tras realizar un experimento en el que descubrió que aquellos que habían masticado esta variante del queso (y no yogur sin azúcar ni leche, que fueron las comidas con las que se confrontó) vieron aumentar los niveles de pH de sus dientes, lo que ayudaba a protegerlos contra las caries.

nueces
NUECES

Una combinación perfecta de ácidos grasos omega-3 y vitamina E que hace destacar a este fruto seco (una clase de alimento por lo general muy beneficioso para nuestra piel).  El potasio ayuda a nuestro sistema nervioso, el magnesio evita la formación de coágulos sanguíneos y sus proteínas refuerzan nuestras defensas.

langosta
LANGOSTA

Este marisco posee altas cantidades de zinc, que tiene propiedades inflamatorias y ayuda a la regeneración de las células de la piel. Otras buenas fuentes de zinc son la carne de cerdo, de ternera y de cordero, así como las nueces o las legumbres.

brócoli
BRÓCOLI

El brócoli nos ayuda, entre otras cosas, a proteger nuestra piel. Puede protegernos de la dañina y envejecedora acción del sol… siempre y cuando lo frotemos por nuestra piel. Si no es así y optamos por ingerirlo, conseguiremos algo de potasio, calcio, magnesio, fósforo, sodio, vitamina A y C y bastante agua, que lo conforma en casi un 90%.

arandanos
ARÁNDANOS

Y acabamos la lista con un habitual en las dietas de alimentos saludables que proporciona vitaminas C y E, dos antioxidantes que ayudan a que la piel brille, además de arbutina, un glucósido que se utiliza de forma habitual en Asia para blanquear la piel, y flavonoides, que ayudan a preservar nuestra memoria a corto y largo plazo. Al fin y al cabo, los efectos del envejecimiento no son sólo externos.