Abdominoplastia

El abdomen es una de las zonas del cuerpo donde se acumula la grasa con más facilidad. Los embarazos, seguidos a menudo de distensión de la musculatura abdominal, variaciones de peso y desordenes hormonales contribuyen a la formación de un abdomen poco estético o con deformidades.

La pared abdominal está constituida básicamente por tres elementos: la piel, el tejido celular subcutáneo con la grasa subyacente y la capa muscular. La afectación de cualquiera de estos tres elementos llevará a la formación de una deformidad del abdomen que, según cada caso, requerirá un tratamiento más o menos complejo.

La abdominoplastia ayuda a recuperar un “vientre plano” y a delinear la silueta corporal. Los mejores candidatos para este tipo de intervención son aquellas personas que, estando cercanas a su peso ideal, presentan cúmulos de grasa en el abdomen junto a una piel flácida que no responden a una dieta o a ejercicio.

Está indicada tanto en hombres como en mujeres aunque es particularmente útil en las mujeres que, a causa de embarazos, tienen dilatación irreversible de la piel y de la musculatura del abdomen. Según las características del paciente se efectuará una abdominoplastia normal o una mini abdominoplastia. Su cirujano le informará sobre la longitud final de la cicatriz, que vendrá determinada por las características del abdomen.

Aquellas mujeres que tengan intención de quedarse embarazadas en el futuro deberían posponer este tipo de cirugía ya que un nuevo embarazo volvería a dilatar la piel y la musculatura.

Preguntas frecuentes

Como en todas las intervenciones, el examen médico previo es imprescindible para detectar cualquier posible anomalía que pudiera contraindicar la operación.

Las personas fumadoras que deseen realizarse una lipectomía abdominal deberán abstenerse de fumar durante al menos dos semanas antes y dos semanas después de la intervención porque el tabaco puede afectar de manera muy negativa en la cicatrización de la herida.

La lipectomía abdominal es una intervención quirúrgica que consiste en despegar y resecar la piel y la grasa del abdomen mediante una incisión en el pliegue suprapúbico (por encima del pubis), lo que permite que la cicatriz quede perfectamente disimulada por la ropa interior o el bañador.

Esta operación permite además la reparación de la pared muscular a fin de conseguir un abdomen plano y, en casos indicados, el estrechamiento de la cintura del paciente.

La extensión de la incisión dependerá de la flacidez de la piel y del grado de obesidad de la persona. Todo el procedimiento dura aproximadamente entre 2-3 horas dependiendo de la complejidad. Una vez finalizada la cirugía, la paciente llevará un sistema de drenaje durante 24 o 48 horas según el caso.

Los puntos de sutura se retiran a las 2 semanas.

Tras la intervención deberá permanecer ingresado al menos un día o dos, dependiendo del tipo de anestesia utilizada y de la extensión del lifting.

Tras la intervención se recomienda reposo durante una semana y el uso de una faja alrededor del abdomen durante aproximadamente un mes. El reinicio de las actividades normales es a partir de las dos semanas y el paciente podrá empezar a hacer ejercicio físico paulatinamente a partir del mes.

Al retirar el vendaje, aparecerá un edema postoperatorio que irá disminuyendo progresivamente. Por lo general, el resultado definitivo no se observa hasta pasados 3-4 meses. La sensibilidad de la zona operada se recupera poco a poco y tarda entre 6 y 12 meses en restaurarse completamente. La cicatriz residual después de una abdominoplastia queda en todos los casos camuflada por cualquier prenda de ropa interior o de baño.

En lugar de bañarse, es recomendable una ducha corta que no afectará a la cicatriz postoperatoria. Durante los primeros días es aconsejable que dicha cicatriz no esté en contacto con el agua. También es importante mantener un control alimentario razonable y no aumentar de peso con el fin de no alterar los resultados de la intervención. Se recomienda hacer comidas pequeñas, pero comer más a menudo para no provocar distensión del abdomen. Para evitar esfuerzos perjudiciales de la pared abdominal en caso de estreñimiento, se pueden tomar laxantes.

Como regla general, después de las operaciones de cirugía estética se recomienda abstenerse de tomar el sol y de realizar ejercicio o natación durante algunos meses. El paciente podrá viajar en cuanto salga de la clínica siempre y cuando tenga en cuenta que a los pocos días deberá volver para que el cirujano controle su evolución.

Estos cuidados posteriores son decisivos para obtener un buen resultado.

La operación puede hacerse con anestesia general o epidural.

¿A qué edad es aconsejable operarse?
Generalmente todas las intervenciones estéticas pueden efectuarse después de la adolescencia. Aún así, es recomendable que las mujeres que deseen tener más hijos en el futuro no se sometan a esta intervención ya que los embarazos pueden hacer perder definición de la zona abdominal.

¿La operación tiene alguna contraindicación?
En todas las intervenciones se realizan una serie de pruebas preoperatorias que, junto con el historial clínico, permitirán detectar si existe alguna contraindicación.

¿Qué riesgos están asociados a esta intervención?
Cada vez son menores los riesgos de este tipo de operaciones, pero como en cualquier tipo de cirugía, se pueden producir ocasionalmente complicaciones condicionadas no sólo por la habilidad y experiencia del cirujano, sino también por la calidad de cicatrización y curación del paciente así como otras complicaciones de tipo anestésico.
En cuanto a riesgos específicos de la lipectomía, puede producirse necrosis cutáneas, seromas (acumulaciones de líquido entre la piel y la pared abdominal), una cicatrización anómala, apariencia antiestética del ombligo y un cambio en la sensibilidad de la piel que podría llegar a persistir de manera permanente. Excepto para el último caso, se requeriría tratamientos añadidos.
Aunque no pueden considerarse riesgos, hay que tener en cuenta que en ocasiones la sensación de acorchamiento o los dolores pueden prolongarse algunas semanas más de lo normal. En casos muy raros, también puede producirse un cambio en la pigmentación cutánea.

¿Se necesitará algún tipo de medicación antes y después de la intervención?
Es importantísimo que el cirujano esté informado de toda la medicación que el paciente tome antes de la operación ya que algunos medicamentos podrían ser incompatibles con la aplicación de la anestesia. En estos casos, tanto el cirujano como el anestesista le indicarán la pauta a seguir. La Aspirina (ácido acetilsalicílico) puede provocar problemas de coagulación y consecuentemente hemorragias.

¿Se puede utilizar algún cosmético para ayudar a que las cicatrices mejoren?
Hay que tener en cuenta que la cicatrización y resultado final depende de varios factores personales y de cada piel. No obstante, existen diversos tratamientos cosméticos que ayudan a que la cicatrización sea rápida y las marcas las mínimas. El cirujano recomendará lo más adecuado para cada caso particular.
El cuidado de la piel antes y después de la operación influirá en el resultado final del aspecto de las cicatrices.Su calidad, la edad, el drenaje, la compresión de la zona y la cosmética son otros factores que ayudan a conseguir una mejoría.